Empiezas a currar a plena luz del día y conforme avanza el tiempo cada vez el monitor parece que te ciegue más. No es el monitor lo que cambia, es la luz ambiental. Lo habitual es tener configurado el monitor para verlo correctamente a plena luz del día, pero conforme cambia la luz ambiental deja de estar ajustado correctamente y puede alterarnos de distintas formas.
¿Lo arreglamos?
Bueno, soluciones definitivas no existen, pero sí paliativos. Como decía un experto hace poco por la radio, este tipo de pantallas tan brillantes (monitor, smartphone, tablet...) a parte de fatigar la vista también evitan que el cuerpo entre en el proceso natural de "prepararse para dormir" con lo que nos dificultará conciliar el sueño entre otras cosas. "El uso de ‘smartphones’ y tabletas antes de dormir multiplica los problemas de sueño"
Para el ordenador tenemos una aplicación llamada f.lux que a lo largo del día adaptará la calidez del color de la pantalla, cálido (anaranjado/rojizo) durante la noche y frío (azulado/blanco) durante el día.
Es una aplicación muy simple, que no interferirá en nuestro trabajo/ocio, que se puede desactivar en cualquier momento y nos ayudará a volver a conciliar el sueño como deberíamos (al menos peor no te hace sentir).
En mi caso, busqué una alternativa opensource llamada Redshift que tiene un funcionamiento muy similar y también recomiendo, aunque para windows no tiene el mismo soporte que f.lux.
Para android aún tengo que experimentar más tiempo, de momento tengo la opción de brillo automático activada, pero esto no cambia la calidez del color de la pantalla. Podemos encontrar, por ejemplo, aplicaciones como Twilight que emulan las funciones de f.lux para smartphones y tablets.
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